Los cultivos de trigo son acompañados por bajas precipitaciones, por lo tanto esa situación se refleja a campo en distintas zonas, con trigos sin demasiada altura ni desarrollo foliar, aunque el sitio Infobicho, de Maximiliano Spinollo, recomendó prestar atención a las plagas.
Ante la eventual presencia de oruga desgranadora (Faronta albilinea) y militar verdadera (Pseudaletia adultera), sugiere monitorear y proteger al cultivo teniendo en cuenta los umbrales de daño, con el fin de cuidar el potencial de rendimiento que puedan llegar a expresar en esta campaña compleja.
El umbral de daño en oruga militar verdadera es de 15-20 isocas/m2, en ataques importantes estas orugas se encuentran en las hojas provocando intensas defoliaciones, también cortan los tallos debajo de las espigas. Y el de la oruga desgranadora es de 5-10 espigas dañadas/m2, estas plagas se alimentan de granos lechosos y pastosos, es de color verde claro o verde oscuro.
En algunas regiones de la Pampa Húmeda, los cultivos de maíz se encuentran emergiendo, mientras que en otras, con falta de precipitaciones, todavía no se comenzó con las tareas de siembra.
Ante eventuales ataques de plagas como grillos subterráneos (Anurogryllus muticus) en cultivos de maíz y soja, se sugiere realizar monitoreos de suelo en lotes destinados a esas siembras.
En ese sentido, se utiliza el mismo método de evaluación que para gusanos blancos, (muestreo de suelos de 0,25 m2 con pala, hasta 25-30 cm de profundidad) a fin de detectar presencia de la plaga.
Vale recordar que estos grillos son del mismo tamaño que el grillo común, aunque presentan coloración marrón claro. En caso de hallar presencia, se pueden realizar controles con insecticidas en forma nocturna.
Fuente: Campo en Acción