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Se presentó la séptima edición del Programa de Buenas Prácticas Agropecuarias (BPAs), que lleva adelante el Ministerio de Agricultura y Ganadería de Córdoba para esa provincia; con el incremento de los fondos públicos invertidos en productores que se sumen a la iniciativa voluntariamente.
Mientras el año pasado se entregaron cheques por 300 millones de pesos, este año presupuestaron llegar a los 500. Al dar cuenta de la novedad, el ministro de Agricultura y Ganadería, Sergio Busso, comunicó que “en la edición 2023 se destinará más dinero para los productores que hacen bien las cosas tranqueras adentro, a través de la validación de una serie de técnicas y métodos de trabajo vinculados al desarrollo sostenible y el cuidado de los recursos”, destacó. Asimismo, se sostiene el descuento del 5% en el impuesto inmobiliario rural.
Adelantó que se podrán validar 13 prácticas y más de 60 indicadores, entre los cuales se incorporaron utilización de refugio en rotación de gramíneas, utilización de drone en agricultura de precisión, incorporación de la producción forestar y bienestar porcino entre otros.
“El programa crece año a año, maduró lo suficiente y ojalá el gobierno nacional pueda definir una política pública que reconozca e incentive a los productores que apuestan a un desarrollo sostenible”, afirmó Busso. Cabe recordar que el programa se lanzó en 2017 y desde entonces las hectáreas pasaron de unas 700.000 a más 2,3 millones, y año a año se sumaron productores de todos los puntos de la provincia.
Fuente: Campo en Acción
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