El clima no le da tregua a la producción agrícola argentina: la primera esperanza de recuperación que era el trigo, está sucumbiendo ante una falta de lluvias eterna; la segunda, que era el maíz temprano, tampoco ganó para disgustos.
El último informe semanal para la zona núcleo de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) es claro: en esa región del país, donde se siembran los lotes de manera temprana y los rendimientos suelen ser superiores que los de los tardíos, alrededor de un 40% de la superficie inicialmente intencionada quedó sin implantarse.
Dicho de otro modo: de cada 10 lotes que se iban a sembrar con maíz temprano, solo se pudieron lograr 6.
EL MAÍZ TEMPRANO, TAMBIÉN SIN LLUVIAS
Según la GEA, eran unas 540.000 hectáreas las que esperaban implantarse de manera temprana, lo que no pudo cumplirse ante la ausencia de lluvias que continuó durante el último fin de semana largo.
El ejemplo más elocuente llega desde la zona de Carlos Pellegrini: “Como no llovió lo previsto, y ante la falta de pronóstico de lluvias para los próximos días, un 40% de los lotes que iban a maíz temprano pasarán a maíz de segunda, luego del trigo y, en el resto se hará con soja. Guardaremos la semilla de maíz que sobra para el año próximo”.
Situación similar se replica en el noroeste bonaerense, donde no llovió y la superficie sembrada temprana ronda el 15%.
En el sudeste cordobés, la situación también es muy ajustada. Allí lo sembrado ronda el 70% de lo que se esperaba sembrar a inicios de campaña, y con los escasos 1 a 3 milímetros que cayeron la semana pasada, posteriores a temperaturas muy elevadas que rozaron los 35°C, parece muy difícil que se pueda incorporar algún lote más.
Solo el noreste bonaerense y el extremo sureste santafesino recibieron precipitaciones importantes en los últimos días; sin embargo, allí los planes de siembra ya estaban casi completos.
LA ESTIMACIÓN DE SIEMBRA, EN RIEGO
Por su parte, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires, en su Panorama Agrícola Semanal (PAS), dijo que hasta ahora se ha implantado el 19,4% de la superficie estimada, lo que de movida significa un retraso de 5,4 puntos porcentuales respecto al promedio de las últimas campañas.
A partir de esta situación, la entidad porteña ya advirtió la posibilidad de que se reduzcan las estimaciones de siembra.
A esto se suman las heladas que impactaron de manera negativa en lotes ya emergidos, y que ahora dependen de la ocurrencia de precipitaciones para su recuperación.
Fuente: Infocampo