Los exportadores argentinos finalmente lograron equiparar compras con ventas declaradas de maíz 2023/24 para dar por finalizado un factor alcista para las cotizaciones internas del cereal.
El gobierno de Javier Milei decidió poner fin este año a la prórroga de plazos de embarque de Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) de maíz instrumentada por la gestión anterior, lo que permitía a los exportadores emplear partidas de campañas anteriores para cumplir con embarques del cereal.
Con la restitución del régimen habitual de registraciones, los exportadores debieron salir a comprar maíz de la presente campaña comercial para poder “empalmar” un gran volumen de embarques registrados ante la Secretaría de Agricultura.
Al 14 de agosto pasado –último dato oficial disponible publicado este martes– los exportadores habían comprado 29,1 millones de toneladas de maíz 2023/24, mientras que a la fecha tienen compromisos de embarque (DJVE) de esa campaña también por 29,1 millones.
Es decir: ya están equiparados comercialmente y no tienen apuro por salir a originar mercadería para poder cumplir con la normativa local, que determina que, al momento de registrar un embarque y fijar el valor FOB de la operación, el embarque –ya sea que se concrete semanas o meses después– debe concretarse con una partida correspondiente a la misma campaña comercial.
Más allá de esa circunstancia, la demanda de maíz en el mercado argentino sigue muy activa porque los embarques brasileños del cereal están operando a “media máquina” frente al apuro por exportar soja antes del inicio de la cosecha estadounidense.
Adicionalmente, se está esperando que el gobierno chino finalmente habilite –en el ámbito polítio– el ingreso de maíz argentino, lo que promovería un factor de demanda sustancial para el cereal.
Fuente: Bichos de Campo